lunes, 3 de noviembre de 2014

Primera fase de la Campaña Nacional




Confirmada la intención de William Walker de invadir Costa Rica, según las noticias que desde Washington D.C reportaba el embajador Luis Molina al presidente Juan Rafael Mora, éste convocó, el 25 de febrero de 1856, a una sesión extraordinaria del Congreso de la República, ante el cual expuso el peligro que significaba la amenaza filibustera para la integridad del país, por lo que solicitó la autorización de llevar la guerra a Nicaragua. Meses antes de la partida del Ejército Expedicionario de Costa Rica hacia Nicaragua, el presidente Mora había nombrado al general salvadoreño José María Cañas Escalante, cuñado suyo, como gobernador de la provincia de Moravia (actual Guanacaste), con el objetivo de que Cañas formase los regimientos de la tropas guanacastecas.




La declaración de la guerra (formalmente oficializada el 1 de marzo) terminó por abrir una importante brecha existente entre dos bandos de la oligarquía cafetalera, la élite que dominaba al país. Cuando Mora fue elegido presidente en 1853, su victoria había traído malestar entre sus opositores, dirigidos por la influyente y poderosa familia Montealegre. Esto generó problemas políticos, económicos e incluso personales entre los miembros de las familias dominantes del país. Mientras que los Tinoco, Iglesias y Aguilar se afiliaron al bando Montealegre, los Mora, Cañas, Oreamuno y Escalante decidieron apoyar al presidente.Los "moristas" respaldaban la guerra como la única alternativa para expulsar a los invasores norteamericanos de Centroamérica, pues creían que se tenía que ir un paso adelante que el enemigo, sin esperar a que éste se fortaleciera y pudiera tomar el país, mientras que los opositores consideraban que Costa Rica no estaba preparada para llevar a cabo una campaña militar en el exterior, por lo que proponían que el país negociara con Nicaragua o se esperara a ser atacados y entonces defenderse

Ejercito de Costa Rica



En lo que se refiere a la infantería, un reducido número de sus componentes eran soldados rasos con formación militar, a los que se les conocía como veteranos, mientras que la gran mayoría era cuerpos de reservistas voluntarios o milicianos, que interrumpían ocasionalmente su vida civil para recibir instrucción militar y educación en el manejo de armas, con el compromiso de acudir en la defensa del territorio nacional cuando se les convocara.

Este tipo de organización fue reestructurada entre 1824 y 1838 por órdenes emanadas de las autoridades a cargo de la República Federal de Centroamérica, incrementando el número de la soldadesca de 135 hombres en 1826 a 2000 en 1832. Este número de efectivos continuó creciendo posterior a la caída de Francisco Morazán en 1842, de modo que para el año 1850 el ejército nacional contaba con 5000 hombres.

Con el ascenso del presidente Juan Rafael Mora, éste decidió reorganizar el ejército. Esta fue una medida aplicada con el propósito de crear condiciones para mantener el orden, debido a que la falta de disciplina de las tropas y de orden entre las oficialías había transformado al ejército en un instrumento de las facciones que promovían divisiones y conflictos regionales, basados en localismos. Las medidas aplicadas por Mora iban destinadas a poner al ejército bajo la autoridad del Ejecutivo y así fortalecerlo. Sin embargo, también se ha argumentado que Mora tenía la percepción de que el país podría entrar en conflicto bélico con la vecina Nicaragua en cualquier momento, debido a las diferencias limítrofes entre ambos países producidas desde la anexión del Partido de Nicoya en 1824.


Uniformes de la oficialía del ejército de Costa Rica utilizados durante la Campaña Nacional 1856-1857. Museo Histórico Cultural Juan Santamaría.

William Walker



Fue un médico, abogado, periodista y político estadounidense, oriundo de Nashville, Tennessee. Ha pasado a la historia como el más reconocido de los filibusteros del siglo XIX. Sobre su presencia en Centroamérica se han expuesto muchas teorías. Se afirma que desde un inicio su interés era convertir a Centroamérica en una república esclavista, tomándose en cuenta su participación en algunos eventos ocurridos en México, lo cierto es que, en lo inmediato, su proyecto consistía en dominar el sur nicaragüense y el norte de Costa Rica. Este territorio se consideraba estratégico en la construcción de un canal interoceánico con base en el río San Juan y el lago de Nicaragua, vislumbrándose como una mejor opción que la ruta por el istmo de Panamá. En tales circunstancias, el interés de Walker por consolidar su presencia en el sur de Nicaragua y el norte de Costa Rica se explica porque tal dominio le garantizaría una posición estratégica en cualquier negociación para la construcción del canal.

Walker zarpó de San Francisco hacia Nicaragua a bordo del velero Vesta, de su propiedad, el 4 de mayo de 1855, al mando de cincuenta y siete expedicionarios, conocidos como Los Inmortales. El 16 de junio de 1855, Walker y Los Inmortales desembarcaron en el puerto nicaragüense de El Realejo y se incorporaron al ejército liberal. A pesar de esto, se rehusaron a recibir órdenes de los mandos nicaragüenses, por lo que Walker fue ascendido inmediatamente a Coronel para formar su propia división, la llamada Falange Americana. El gobierno de Castellón, radicado en León, le otorgó a Walker y sus hombres la ciudadanía nicaragüense

Causas de la Campaña Nacional



En Costa Rica, se considera a la Campaña Nacional de 1856-1857 una importante etapa de la historia costarricense, dado que dio impulso al proceso de construcción del estado nación en Costa Rica, y representa la consolidación de la independencia y el inicio del proceso de formación de la identidad nacional.

La causalidad de la Campaña Nacional de 1856-1857 es múltiple y compleja:

·         Situación económica, política y social de Costa Rica durante la década de 1850, en medio de un auge importante producido por la exportación del café a Inglaterra, que le permite consolidar la formación, modernización y profesionalización de las fuerzas armadas.

·         Situación política de Nicaragua, sumida en una guerra civil entre dos partidos políticos que llevará a uno de ellos a intentar obtener la victoria reclutando tropas mercenarias extranjeras.

·         Intereses geopolíticos y estratégicos de las potencias de la época, en especial de Estados Unidos y Gran Bretaña, que buscan controlar la ruta del tránsito a través del río San Juan, Lago de Nicaragua e istmo de Rivas, por el potencial que representa para la construcción de un canal interoceánico.

·         Política expansionista de los Estados Unidos durante el siglo XIX, en especial por parte de los estados sureños, cuya economía agrícola, dependiente de la esclavitud, les empuja a la anexión de nuevos territorios ante el avance del movimiento abolicionista en los estados del norte, más industrializados.

Segunda fase de la Campaña Nacional



 
Superada la epidemia del cólera, se inicia la segunda fase, conocida históricamente como la Campaña del Tránsito. Ésta inició en noviembre de 1856 y culminó en mayo de 1857. La Campaña del Tránsito tuvo como objetivo principal el control de la ruta del río San Juan. Dio inicio el 22 de noviembre con la Batalla del puerto de San Juan del Sur, y se continuó con el Combate de la Trinidad (22 de diciembre), toma de vapores filibusteros en el río San Juan (23 de diciembre), combates del Castillo Viejo (16 de febrero de 1857), el Fuerte de San Carlos (febrero-marzo) y la isla Ometepe (marzo-abril), para culminar con las batallas de San Jorge (marzo-mayo) y Rivas (abril-mayo), en las que se involucraron las otras repúblicas centroamericanas. La Campaña Nacional culminó con la rendición de William Walker el 1 de mayo de 1857.

¿Qué fue la Campaña Nacional?



La Campaña Nacional fue un conflicto que involucró directamente tanto a Costa Rica como a Nicaragua, en menor medida, a los demás países centroamericanos, y de forma indirecta, a Estados Unidos, Reino Unido y el Imperio francés. Históricamente, se le ha dividido en dos fases de desarrollo estratégico militar: el primero entre marzo y abril de 1856, que inició con la Batalla de Santa Rosa (20 de marzo), en Guanacaste, y el Combate de Sardinal (10 de abril), en el cantón de Sarapiquí, en Costa Rica, que culminaría finalmente con la Batalla de Rivas (11 de abril) en Nicaragua. La aparición de la peste del cólera entre las filas costarricenses motivaría su repatriación tras esta batalla.



El nombre "Campaña Nacional" es utilizado
esencialmente en Costa Rica para definir los
acontecimientos que involucraron la
participación directa de este país en el conflicto. Otros términos, también en Costa Rica, utilizados para definir a este conflicto son Gesta del 56, Guerra de 1856, Guerra contra los filibusteros y más recientemente, Guerra Patria.


 
 
 



 


 

Campaña Nacional del 56-57


 





La Campaña Nacional de 1856-1857 fue un conflicto bélico que se desarrolló entre marzo de 1856 y mayo de 1857, el cual enfrentó a la República de Costa Rica, encabezada por su presidente Juan Rafael Mora Porras, contra el ejército filibustero estadounidense al mando de William Walker, como consecuencia de la ocupación filibustera en la vecina Nicaragua desde1855.



En Nicaragua, el conjunto de los hechos de la guerra civil librada entre legitimistas y democráticos que llevaron al ascenso al poder de William Walker y que motivaron la participación costarricense en dicho conflicto se conoce como Guerra Nacional de Nicaragua, sin embargo, las batallas libradas en Nicaragua antes de la Batalla de Santa Rosa el 20 de marzo de 1856, así como algunas de las batallas ocurridas entre abril y noviembre de 1856, cuando Costa Rica no participó de la guerra por enfrentar la epidemia del cólera, no se consideran parte de la Campaña Nacional, aunque sí se toman como uno de sus antecedentes directos.


 

miércoles, 29 de octubre de 2014

José María Cañas


 
Bibliografía.
 
 
 
 
 
José María Cañas Escamilla (SuchitotoEl Salvador23 de septiembre de 1809  PuntarenasCosta Rica2 de octubre de 1860), fue un militar salvadoreño, recordado principalmente por su papel destacada al frente del ejército costarricense, durante la Campaña Nacional de 1856-1857, que enfrentó a las naciones centroamericanas contra los filibusteros de William Walker.
 
 
Fue hijo de don José María Avilés y doña Inés Escamilla. Llegó a Costa Rica en 1840, entre los acompañantes del general Francisco Morazán Quesada que desembarcaron en Puntarenas mientras Morazán continuaba viaje hacia el sur. Contrajo nupcias con Guadalupe Mora Porras, hermana de los Presidentes Miguel Mora Porras y Juan Rafael Mora Porras.
En Costa Rica fue jefe sucesivamente de las aduanas de Moín, Cartago y Puntarenas. En 1847 fue Intendente General del Estado.
Fue Ministro de Guerra en el gobierno de su cuñado Juan Rafael Mora Porras. Se distinguió en la batalla de Rivas el 11 de abril de 1856, y comandó los ejércitos costarricenses en la tercera y más importante fase de la guerra contra el filibustero William Walker. En todas las fases de la guerra se hizo querer mucho de las tropas por su humanidad y su trato afable.
En representación de Costa Rica firmó el tratado Cañas-Juárez, el tratado Cañas-Martínez y el tratado Cañas-Jerez, relativos a los límites con Nicaragua.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Francisca Carrasco

Retrato de Francisca Carrasco Jiménez (1816-1890), heroína costarricense que participó en la Campaña Nacional de 1856-1857.


Vida personal



Francisca Carrasco Jiménez nació el 8 de abril de 1816 en Taras de Cartago, a orillas del río Reventado, en el seno de una familia de mestizos y mulatos, hija de José Francisco Carrasco Méndez y María Trinidad Jiménez. Contrajo nupcias tres veces, la primera en 1834 con Mario Solano, y la última con Gil Zúñiga, de todos los cuales enviudó.

Aun cuando durante esos años las mujeres no podían ingresar a la escuela, Francisca sabía leer y escribir.
 
 
Reconocimientos y muerte
Después de su participación se retiró a vivir en su casa de la Puebla en la ciudad de San José. Siendo una anciana sola tuvo que pedir una pensión al Gobierno que le asignó un monto de 15 pesos mensuales. Murió sumida en la extrema pobreza el 31 de diciembre de 1890.